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GUANAJUATO, Gto. (proceso.com.mx).- Locatarios y expendedores del mercado “Tomasa Esteves” de Salamanca se convirtieron en blanco de presuntos sicarios del crimen organizado, que en tres días han asesinado a seis personas y herido a una más en este centro de abastos.
El mercado se ubica en pleno centro de Salamanca y es el más importante de la ciudad.
A solicitud de la alcaldesa de Morena Beatriz Hernández Cruz, elementos de la Guardia Nacional cercaron el mercado este sábado y mantienen vigilancia en el mismo.
El jueves, tres personas fueron acribilladas y una cuarta quedó herida en un primer ataque desatado dentro del mercado, en dos carnicerías vecinas, aproximadamente a las 8:30 de la mañana.
Dos de las víctimas fallecieron en los locales de carnes: un hombre de 47 años y un joven de 24.
Los heridos fueron auxiliados por paramédicos de la Cruz Roja que los trasladaron a la delegación de este organismo, y posteriormente los ingresaron a un hospital.
Un tercero falleció en el hospital; la cuarta víctima quedó herida.
Testigos señalaron que los responsables huyeron en dos motocicletas.
El viernes, otro comerciante de esta central de abasto fue asesinado también a disparos, al mediodía y ante decenas de personas que se encontraban vendiendo o realizando sus compras.
El comerciante, conocido como “El Pachangas” y originario de Irapuato, se encontraba en sus actividades cuando dos hombres a bordo de una motocicleta llegaron hasta él y le dispararon varias veces.
Después de este segundo incidente, varios comerciantes optaron por cerrar sus locales y retirarse, atemorizados por ambos ataques.
Pero en la madrugada del sábado, quienes acudieron al mercado se encontraron con dos cuerpos envueltos en plástico y con cartulinas, presuntamente firmadas por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Este hallazgo fue hecho pasadas las 5 de la mañana.
Los cuerpos fueron colocados en el exterior de una panadería. Dentro del mismo plástico en que fueron envueltos, se colocaron dos cartulinas color verde con mensajes amenazantes.
Este hecho provocó un mayor temor entre locatarios, por lo que este sábado el mercado lució casi vacío.
El gobierno municipal solicitó el auxilio de la Guardia Nacional para resguardar el mercado “Tomasa Esteves”, por lo que un grupo de elementos colocó vallas para controlar el acceso de vehículos y peatones en la zona.
“Salamanca vuelve a teñirse de sangre y de nueva cuenta somos testigos de los cobardes y arteros ataques que cobran la vida de gente inocente”, señaló el gobierno municipal en un comunicado publicado la noche del viernes.
“Debido a la gravedad de los acontecimientos, hemos dispuesto el inmediato reforzamiento de la seguridad en el mercado por parte de la Guardia Nacional y de la nueva Policía de Salamanca”, señala el comunicado.
También se anunció la convocatoria a una reunión urgente con locatarios y comerciantes del mercado y el establecimiento de una mesa de trabajo solicitada por los mismos.