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El Subsecretario López-Gatell aseguró que todavía no existe una prueba rápida con suficiente utilidad para que su apliación sea considerada en el país.
Ciudad de México, 24 de marzo (SinEmbargo).– Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, dijo que en México aún no se fomenta la aplicación de pruebas rápidas para descartar o cofirmar casos de COVID-19 porque no existe alguna que brinde resultados certeros.
“Hasta donde tenemos conocimiento por la revisión sistemática que hacemos todos los días de productos que aparecen no sólo en Mexico, si no en el mundo, no hay todavía una prueba rápida con suficiente utilidad para ser considerada ya en su operación real”, dijo el funcionario al ser cuestionado sobre si Mexico contempla aplicar pruebas rápidas como ya lo hacen otros países.
Precisó que éstas podrían aplicarse si se sabe de alguna que sea más efectiva y si la estrategia contemplada por el Gobierno lo amerita. “Si en algún momento la hubiera (una prueba más precisa), y si obviamente se considerara hacer pruebas de forma generalizada, podríamos considerar este tipo de aditamentos”, expuso.
El funcionario explicó que las pruebas rápidas son dispositivos de sospecha diagnostica que se procesan rápidamente y no necesitan un proceso de la laboratorio, “pero por lo mismo son pruebas cuya calidad diagnóstica es limitada”, precisó.
Estas son dos propiedades de las pruebas, se llaman técnicamente sensibilidad y especificidad, que son la capacidad de detectar correctamente un caso que es positivo, o de detectar como descartado un caso negativo. Estos dos elementos son fundamentales para que la prueba sirva.
López-Gatell detalló que las pruebas existentes aún tienen probabilidades de detectar correctamente un caso positivo y uno negativo menores al 60 o 50 por ciento, “es casi equivalente a echar una moneda al aire y hacer un volado”, dijo.
La Secretaría de Salud informó hoy que el coronavirus ya provocó la muerte de cinco personas en México. Además, hay 405 casos confirmados y otros mil 219 casos sospechosos en el país.
Tres de las defunciones por la enfermedad han ocurrido en la Ciudad de México; una en Jalisco y una en Durango. La última muerte se registró entre la noche del lunes 23 de marzo y la noche de este martes 24 de marzo. Se trata de una mujer que perdió la vida en la capital.
Los casos confirmados se distribuyen en 31 entidades de México. Sólo en Tlaxcala no se han registrado, aunque sí tienen 18 sospechosos.