#Romeo #busca #una #nueva #familia #tras #haber #sido #atravesado #con #una #flecha #recuperó #exitosamente
“Con la infección, el proceso inflamatorio y todo eso todavía está grave; por eso necesitamos que sea un hogar muy responsable”, dijo su rescatista.
Romeo se está recuperando exitosamente y ahora está en la búsqueda de un hogar para poder vivir sus días en tranquilidad, luego del desafortunado episodio que vivió. Este perrito callejero fue atravesado por una flecha en su cuello cuando se encontraba abandonado en Culiacán, al noroeste de México.
Afortunadamente, el peludo no sufrió ningún daño vital y ya se encuentra fuera de peligro. No obstante, aunque su salud es ahora estable, aún no han dando con el responsable de este crimen, el cual no tiene ningún tipo de justificación.

El objetivo en este momento, tanto para Romeo como para el refugio que lo ha ayudado a recuperarse, la Fundación Laika Protectora de Animales, es encontrar un hogar para que el peludo pueda empezar de nuevo. Después de sufrir tanto daño, lo mínimo que merece es una oportunidad.




“Está fuera de peligro. Obviamente, con la infección, el proceso inflamatorio y todo eso todavía está grave; por eso necesitamos que sea un hogar muy responsable con los cuidados pertinentes para que no se vaya a complicar un poquito”, dijo Rebeca Uriarte Ordóñez, presidenta de esta fundación, según reseñó Línea Directa.
No ha sido sencillo para Romeo y tampoco para sus cuidadores, debido a que todos los gastos para su recuperación han sido elevados y difíciles de afrontar. Por ello pidieron que cualquiera que quiera colaborar con la rehabilitación del can, se comunique con ellos.




Mientras, Romeo seguirá esperando que alguna familia esté dispuesta para abrirle las puertas de su hogar y amarlo él como lo merece, con todos los cuidados necesarios en esta etapa tan complicada de su vida.




El perrito no se dará por vencido, porque si ya pudo sobrevivir a semejante ataque, lo que queda ahora será mucho más fácil. Afortunadamente cuenta con las personas correctas a su lado, que lo apoyan incondicionalmente.