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La renuncia masiva de panistas de Mazatlán y de varios municipios del sur encabezada por Alejandro Higuera es una más de las rebeliones que ponen a temblar al PAN. Casi se queda sin militancia y también coloca en riesgo de desmoronamiento a la alianza opositora Va por Sinaloa.
En el frente morenista ya se frotan las manos debido a que se supone que “El Diablo” y su gente vendrán a engrosar a la alianza Juntos Hacemos Historia que encabeza el precandidato a gobernador Rubén Rocha Moya, porque también se vaticinan desbandadas en el PRI, empezando en el puerto con el exalcalde Fernando Pucheta, que ya está en tratos con el PAS de Héctor Melesio Cuen Ojeda.
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Al presentar su renuncia en el Consejo Directivo Estatal del partido, Higuera dijo que tenía 39 años de militante y que se van porque no quieren ser alcahuetes de la alianza oprobiosa con el PRI, que siempre han sido contrincantes y de pronto desde las cúpulas los pretenden juntar.
En Mazatlán, también silenciosamente ya se fue el excandidato a gobernador Martín Heredia y en Ahome Miguel Ángel “Líder” Camacho. Se unen a Movimiento Ciudadano. Los mismos panistas mencionan que pronto connotados políticos de Culiacán, entre ellos Adolfo Rojo Montoya, también podría renunciar al partido, y en Ahome el dirigente Ariel Aguilar mantiene una férrea oposición a la intención de Juan Carlos Estrada de ir en alianza con el PRI.
Los militantes de sangre azul se sienten marginados y de seguir las deserciones el partido pronto podría quedar en mero cascarón, como ya le sucedió al PRD, donde la puntilla la dio Juan Guerra, quien junto con un grupo de simpatizantes se unió a Morena, y aquí en Los Mochis antes se salieron Antonio Davizón, Luisa Reyna Armenta, Lucio Antonio Tarín, Efrén Lerma y Jesús Armenta Perea, entre otros.
En la alianza opositora se considera que Mario Zamora Gastélum es buen candidato, joven y preparado, pero que enfrentará condiciones adversas, entre otros el hecho que Jesús Valdés haya trabajado para ser él el candidato, que en Culiacán y Mazatlán aún se resistan a que les impongan candidatos de Los Mochis y a que desde ahora se vaticina que en Ahome toda la fuerza malovista y del Trébol le jugará en contra, con la intención de hacerlo perder.
En Mazatlán, Pucheta coquetea con Cuen, y el PAS casi amarra una alianza con Morena, pero aparte mu-chos priistas insisten en que a Quirino Ordaz le impusieron al candidato desde el centro, con las facultades plenipotenciarias que se atribuyó el año pasado el dirigente nacional, Alejandro Moreno, y que eso haría que la gente del gobernador no le ponga muchas ganas a apoyar a la alianza opositora. Se cruzan apuestas.
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Popurrí. Hasta corrido le compusieron ya a Bernardino Antelo, quien ha acelerado la realización de reuniones los fines de semana con simpatizantes en busca de ser el nominado por el PRI para la alcaldía.
AMLO. Como baldazo de agua fría cayó a los morenistas el contagio de Covid-19 del presidente Andrés Manuel López Obrador, le desean que se restablezca pronto. Claro que sus detractores también mostraron su beneplácito.